CATOLICOS, JUDIOS Y MUSULMANES

El rey de Arabia Saudita hizo una histórica visita a Benedicto XVI

El Papa dio una bienvenida calurosa en el Vaticano al rey Abdullah, de Arabia Saudita, durante una visita histórica porque se trata de la primera vez que un monarca árabe se entrevista con un Pontífice. Ambos dialogaron en árabe e italiano, con ayuda de dos sacerdotes intérpretes, durante 30 minutos. Benedicto XVI le expresó su preocupación por las dificultades que atraviesa el culto católico en su país. Pero, ambos coincidieron en la necesidad del diálogo interreligioso y auspiciaron una solución justa para Medio Oriente.

El Santo Padre da la bienvenida al rey Abdullah en el Vaticano.
Ciudad del Vaticano (ANSA y EFE) - El papa Benedicto XVI recibió ayer en el Vaticano al rey Abdullah de Arabia Saudita, en un encuentro histórico por tratarse de la primera vez que un sucesor de Pedro otorga una audiencia a un monarca árabe. En la reunión el Pontífice mostró su preocupación por las dificultades que tiene el culto cristiano en ese país árabe.El Papa dio una bienvenida particularmente calurosa al monarca saudita -cuyo título es protector de las mezquitas de La Meca y Medina- al salir a su encuentro en la sala del Tronetto, y estrecharle con ambas manos las suyas.La audiencia privada con el rey, que llegó con un séquito de doce personas, tuvo lugar después en la librería del Pontífice y se prolongó durante unos 30 minutos. Durante el encuentro, Benedicto XVI habló en italiano y Abdullah en árabe, y se entendieron con asistencia de dos intérpretes, ambos sacerdotes. Las conversaciones fueron también “cálidas”, según una declaración difundida por el Vaticano, y tocaron la necesidad del diálogo interreligioso e intercultural entre los cristianos, musulmanes y judíos “para la promoción de la paz, la justicia y los valores espirituales y morales, especialmente en respaldo de la familia”.Ambas partes intercambiaron ideas sobre Medio Oriente y resaltaron la necesidad de “una solución justa para toda la región, y en particular para el conflicto israelí-palestino”, agregó la nota.CRISTIANOSLa Santa Sede precisó que “la presencia positiva y las tareas de los cristianos en el reino también fue tratada” durante la audiencia.Benedicto y otros funcionarios vaticanos han protestado con frecuencia ante la imposibilidad de que los cristianos practiquen su culto abiertamente en Arabia Saudita, donde no existe públicamente una sola iglesia, sinagoga o templo de cualquier religión salvo la islámica.El órgano oficial del Vaticano, L"Osservatore Romano, señaló que la Santa Sede dijo esperar que el encuentro produzca un diálogo franco entre ambas partes sobre el tema, y destacó que hay más de un millón de extranjeros cristianos que trabajan temporalmente en el reino.Al finalizar la audiencia, Abdullah le entregó a Benedicto un regalo tradicional de Medio Oriente: una espada dorada incrustada de piedras preciosas y una estatua de oro y plata que representa a un hombre con un camello, debajo de una palmera.El Papa, por su parte, regaló al rey un grabado de 1550 que representaba al Vaticano y una medalla de oro del pontificado.Tras su encuentro con el Pontífice, el soberano se reunió con el secretario de Estado vaticano, cardenal Tarcisio Bertone.Arabia Saudita no tiene relaciones diplomáticas con el Vaticano. Pero Benedicto ha indicado que desea buenas comunicaciones con todos los países que todavía no tienen relaciones con la Santa Sede, entre ellas Arabia Saudita y China.