FUJIMORI LIBRE

Fujimori desconfía de justicia peruana
EVA VERGARA
Associated Press
SANTIAGO DE CHILE - El ex presidente peruano Alberto Fujimori dijo el viernes que su estrategia de retorno al Perú incluye que en su país haya una justicia que responda a estándares internacionales, pero "esto todavía no se da".
Durante una caótica rueda de prensa en las afueras de la residencia en que se aloja desde que fue liberado el jueves, rechazó las acusaciones del violaciones a los derechos humanos y de enriquecimiento ilícito, durante sus gobiernos, de 1990-2000.
Subido en el borde de la puerta de la van de su abogado chileno, Fujimori incluso se dio tiempo para pedir a los policías, que apartaban a la prensa de su persona, que le permitiera acercarse con sus micrófonos.
Fujimori habló luego de abandonar durante un par de horas la residencia, en un elegante barrio de Santiago, para visitar las oficinas de su abogado, Gabriel Zaliasnik.
El ex gobernante estuvo seis meses detenido en Santiago a la espera del proceso que decidirá si debe o no ser entregado al Perú para ser juzgado por 10 casos de corrupción y dos de violaciones a los derechos humanos.
Fujimori virtualmente pronunció un discurso en medio del tumulto de periodistas, fotógrafos y camarógrafos, y contestó sólo algunas preguntas.
Sobre el retorno a su país, del que huyó el 2000, dijo que "demandó y demanda toda una aplicación de una estrategia, que supone que la administración de justicia en mi país será aplicada a estándares de justicia internacionales. Yo consideró que esto todavía no se da", afirmó.
Dijo que una muestra de que no hay una justicia imparcial en Perú es el ocultamiento de las conclusiones de la firma internacional Kroll, que señala que no se enriqueció ilícitamente mientras estuvo en el poder.
Declaró que el informe "no sale a la luz pública, sino que se le secuestra porque en ese informe se desmiente totalmente" el enriquecimiento ilícito.
Sobre las acusaciones de violaciones a los derechos humanos de las cuales se acusa a su régimen, contestó que instruyó combatir el terrorismo sin cometer abusos, pero que "se dan esos casos aislados".
"A raíz de estos casos aislados, pretender imputarme acusaciones de esa naturaleza, eso es lo que está totalmente injustificado", afirmó.
También rechazó haberse coordinado con su ex asesor de seguridad, Vladimiro Montesinos, para reprimir y abusar.
Ante el malestar peruano, la presidenta Michelle Bachelet tuvo que explicar -telefónicamente- el viernes al presidente peruano Alejandro Toledo que la justicia chilena es autónoma y que la libertad de Fujimori no constituye ninguna señal política, razón por lo cual no deberían verse afectadas las relaciones bilaterales.
El proceso de extradición tardará todavía, al menos, un mes, según anticipó el jueves el juez de la causa, Orlando Alvarez.
La resolución de Alvarez debe ser aprobada o rechazada por la sala penal de la Corte Suprema, la que le otorgó la libertad provisional, pero con arraigo.
Fujimori llegó imprevistamente a Chile, desde Japón, el 6 de noviembre, en lo que sería un paso antes de su retorno al Perú, según alcanzó a decir en un mensaje grabado antes de ser detenido.