SEBASTIAN PIÑERA

La promesa de Evelyn al asumir mesa UDI: "Voy a tratar de ser más diplomática..." "...Pero no puedo garantizar que alguna vez no se me escape algo como lo de ayer", advierte la senadora, sin arrepentirse de nada de lo que le dijo a Piñera, porque "él no puede echar a perder así su liderazgo".

Alvaro Valenzuela La Segunda Lo hizo otra vez. La misma Evelyn Matthei se ríe cuando habla de su estilo político y de esa capacidad suya para decir frases tan lapidarias como cargadas de ironía. La senadora -y a partir de mañana vicepresidenta de la UDI- no duda en admitir su gusto por los duelos verbales, como los que protagonizaba con el ex ministro Eyzaguirre al discutir el presupuesto... o como el que la tiene ahora enfrentada con uno de sus contrincantes más clásicos: el ex candidato presidencial Sebastián Piñera.Asegura que no ha pisado el palito ni se trata de repetir la historia. Que cuando dijo eso de inventar un campeonato mundial de cualquier cosa para que Piñera no vuelva a Chile, lo hizo muerta de la risa, en tono de broma. Aún más, está convencida de que el día de mañana, cuando se encuentren en algo, "yo me voy a reír de nuevo y él me va a decir me debís una, y listo, se acabó". Pero también deja en claro que lo de ayer no fue un gustito, sino que había un mensaje profundo: en momentos en que RN y la UDI parecían avanzar en un trabajo unitario, argumenta, "una persona no puede venir e irrumpir con una idea (la de crear una mesa de diálogo con el gobierno para reformar el sistema electoral), sea buena o mala, pero que entiendo que no había discutido ni con las bancadas de su partido, y pasar a llevar a toda la gente que ha pasado a llevar".El mensaje, en buenas cuentas, es que "él no puede echar a perder el liderazgo que construyó con motivo de la segunda vuelta, donde todos nos cuadramos detrás de su candidatura: cualquier liderazgo conlleva deberes además de las prerrogativas, y esos deberes no se pueden olvidar. No hay ningún general que pueda ganar una batalla si los que están detrás de él, coroneles, capitanes, soldados rasos, no sienten que el general está jugando por todos: en el mismo minuto que vean que se está tratando de salvar solo, lo dejan botado".-Pero Ud. también dijo algo que debe ser bien fuerte para él: que nunca va a ser Presidente de la República... -Si él sigue así, no lo va a ser nunca... Lo que yo quería decir y que estoy diciendo ahora, es que un líder que no actúa en forma responsable, deja de serlo. Y que si una persona actúa permanentemente de acuerdo a lo que él cree, sin consultar siquiera con los parlamentarios de su partido, deja de ser líder, y eso significa que tampoco va a ser nunca Presidente de la República. Ahora, él puede construir un liderazgo, pero sobre la base de saber escuchar.-Este episodio hace pensar que la Alianza vuelve a su antiguo clima de enfrentamientos...-Absolutamente no. Es un episodio totalmente aislado. Hoy veo una fortaleza en la oposición que tiene nervioso al gobierno, al punto que esta semana ha tratado por todos los medios de meter una cuña entre los partidos.-¿Y Ud. no está pisando el palito?-No, para nada. Además, en el fondo uno debe entender cómo son las personalidades de la gente: a Piñera no le importa recibir de esta manera. Lo conozco de hace mucho tiempo, trabajé con él y él es duro. Si fuera una persona distinta, muy sensible, claro, sería complicado. Pero si ves mi historia y la de él, hay un dar y recibir duro desde hace mucho, y eso no significó que yo no lo haya apoyado cuando fue el candidato.-¿Y volvería a trabajar por él?-Sebastián se lo tiene que ganar: ése es el recado. Es importante que él sepa que nadie tiene nada en su contra, pero sí tenemos mucho en contra de algunas formas en que actúa: sin mirar para el lado, sin consultar. -Su reacción a Piñera tiene un ingrediente adicional: mañana asume una de las vicepresidencias UDI. ¿Así va a ser el estilo de Evelyn Matthei como miembro de la mesa de su partido?Ante la pregunta, inevitablemente Evelyn Matthei estalla en risas:-Yo no sé si tengo otro estilo... Claro, uno puede tratar y hacer esfuerzos enormes por ser más diplomática, por decir las cosas más suaves, ¡pero al final te pillan un jueves en la mañana en una radio y tú dices lo que piensas! (más risas)... Y por lo demás ustedes saben que es un estilo bastante heredado, ¿no? Así que prometo que voy a tratar de ser lo más diplomática posible, lo más paciente posible -la paciencia no es una de mis virtudes-, porque realmente creo que cuando tú tienes una posición de responsabilidad tienes que hacer un esfuerzo triple... Pero yo no puedo garantizar que alguna vez no se me escape algo como lo de ayer en la mañana... ¿qué voy a hacer? -¿Eso es parte del estilo Matthei? -Y probablemente las primeras veces que dije algo la gente se escandalizaba, pero a estas alturas ya saben que digo las cosas súper claras, pero que no guardo rencores. Un día puedo pelear contigo en algo donde efectivamente estoy muy en desacuerdo, pero mañana puedo perfectamente concordar contigo otra cosa. Así es la vida, así son las relaciones y sobre todo así es la política. -¿Y qué significa para Ud. asumir una vicepresidencia en la UDI por primera vez? Porque Ud. tampoco calza con el prototipo de su partido... -Tampoco, soy probablemente más liberal en muchas cosas, pero me he sentido enormemente cómoda, muy querida, con un ambiente de trabajo espectacular. Entonces lo de ahora ha sido una cosa muy emocionante, porque un poco ese cariño que yo tenía hacia la UDI, en estos días he sentido que es mutuo.-Para muchos, la posibilidad de que Ud. entrara a la mesa se empezó a armar con su intervención en el Consejo Ampliado, cuestionando a De la Maza. ¿Tuvo algo que ver ese episodio?-Creo que sí. Yo he trabajado mucho con los senadores, pero a los diputados no los conozco tanto, y quizá ese día muchos de ellos vieron una intervención que les llamó la atención o algo. En general me he mantenido mucho en mi área, la económica, y poco en política, y cuando intervine ese día, fue justamente porque creo en los equipos. Cualquier persona tiene derecho a descollar, Sebastián Piñera o Pancho de la Maza, pero siempre debe ser con mucho cuidado hacia el equipo.-¿Y qué tiene que ver la Evelyn Matthei que debutó el '88 en De cara al País, con la Evelyn Matthei que ahora asume en la mesa UDI?-Mantengo la misma pasión por el tema de la pobreza o por que los dineros del Estado se gasten donde se debe: todo lo que aprendí de Miguel Kast. Probablemente ahora me tirita menos la voz y me doy licencias que antes no me daba, en cuanto a decir cosas un poquito duras, y probablemente tengo bastantes más arrugas. Y sí creo que he ganado mucho en oficio, porque la política te cobra la cuenta cuando llegas a posiciones de poder sin tener recorrido. -En un principio Ud. era una "estrellita" política: le caía bien a todo el mundo, y ahora es una persona controversial...-Siempre he sido igual. Probablemente hay un cambio de percepción: ésa era la época de la democracia de los acuerdos y la política era mucho más amable. Además había un encantamiento del público con los políticos, sobre todo con los políticos jóvenes, que hoy día ya no existe.-Eso originó un fenómeno Matthei...-Además creo que tenía mucho que ver con mi padre: la gente en ese minuto volcó en mí un cariño que tenían hacia él. Ahora, tampoco te puedes mantener como una niñita encantadora siempre, porque la vida no es así...¿Presidenciable?"El poder que tuvo mi padre era nada comparado con el de Pinochet, pero igual fue muy grande, y por eso yo no soy una enamorada del poder: veo el daño que les hace a las familias, la cantidad de tiempo que te quita, las traiciones que se sufren. De modo que no pensaría mover ni así un dedo por ser candidata presidencial".Mop-Gate: "Lagos no tuvo lealtad con Carlos Cruz... Se lavó las manos" Cuando Evelyn Matthei era una joven estudiante de piano en Londres, no sólo conoció a Claudio Arrau, sino que tuvo con él una conversación iluminadora. De hecho, lo que allí aprendió la ayuda hoy a explicar su propia trayectoria política (desde sus inicios como figura carismática, hasta su situación actual de senadora polémica) y a entender el fenómeno de esa otra hija de general, la Presidenta Bachelet.-Arrau -dice la senadora- fue un niño genio: bastaba que se subiera al escenario para que la gente se volviera loca aplaudiéndolo. Pero cuando llegó a los 20 años, ya no era ese niño genio, y tuvo que captar al público enteramente de nuevo; esta vez, no con el encanto de ser niño, sino sólo sobre la base de ser un intérprete fenomenal. El contó que ese cambio había sido muy duro, y que incluso se había hecho un sicoanálisis muy profundo respecto de ello. Eso es algo que me quedó muy grabado, porque el fenómeno se da en muchas ocasiones en la vida. De hecho, es lo que ocurrió conmigo al principio en política: un encantamiento de la gente, pero después surge lo de verdad. Con Michelle Bachelet pasa lo mismo: hubo una empatía con esta mujer simpática, hija de un general fallecido en circunstancias tan trágicas, que vino del exilio, que fue la primera ministra de Defensa... un encantamiento. Pero la verdadera Michelle Bachelet va a salir: tú no puedes vivir del encantamiento y éste es súper peligroso, porque la gente se forma una imagen que no necesariamente es lo que corresponde a la realidad. Entonces, cuando empieza a surgir la verdad, la gente se comienza a desilusionar y no es fácil construir tu identidad.-En cualquier caso, Ud. ha sido benévola en sus juicios sobre ella, mientras que con Lagos fue durísima.-Hay muchas cosas que me gustan de Lagos, un hombre culto, inteligente, entretenido para conversar con él, pero hay dos cosas que me revientan. Una, esa soberbia tan brutal, que se le notaba en la forma en que trataba a los chilenos, casi como si fuera el Zar. Y la otra cosa que no me gustó, es su falta de lealtad: falta de lealtad con Longueira, con la UDI, pero también falta de lealtad con sus máximos colaboradores, como Carlos Cruz, y como toda la gente que está metida en el caso Mop-Gate. Allí se lavó las manos de la forma más brutal.-Ud. es parte en ese juicio. ¿Lagos es finalmente la presa allí? -Cuando tienes los años de experiencia que tengo, sabes que las presas mayores se preocupan de no dejar rastro, y no es fácil llegar a ellos, aunque todo el mundo capte que Cruz no se llevó la plata a su casa, sino que probablemente fue, como él lo está diciendo, entregada a la campaña. No creo que sea fácil llegar a Lagos, pero sí me interesa que la gente capte, que al final el beneficiado fue él, no Cruz. -¿Y qué le parece la actuación de Carlos Ominami en ese juicio? -Pensé que él iba a decir la verdad, e iba, de alguna manera, a darle una mano a Carlos Cruz. Pero también recordemos que cuando finalmente fue donde la ministra Chevesich, fue en la misma época en que ya estaba cuestionado su hijo por un asunto bastante similar. Entonces no es una situación fácil para uno.