LA PROXIMA CUBA DEMOCRATICA Y LA VENEZUELA PLURALISTA

Rice reprocha el diálogo con Castro


El ministro Moratinos reitera ante la secretaria de Estado norteamericana su deseo de ver una Cuba democrática e insiste en que la estrategia española dará buenos resultados para alcanzar ese fin

Antonio Rodríguez. Madrid. Sin ningún tipo de pudor diplomático, la secretaria de Estado norteamericana, Condoleezza Rice, expresó ayer en público las críticas que tiene la Administración Bush contra el Gobierno español a causa del fluido diálogo que Madrid mantiene con el régimen cubano de los hermanos Castro.

La jefa de la diplomacia estadounidense no se quedó satisfecha con las explicaciones de su homólogo español, Miguel Ángel Moratinos, a tenor de los reproches que lanzó contra la estrategia de la zanahoria que lleva a cabo el Ejecutivo socialista en este crucial momento histórico para Cuba.

Rice se esforzó por dejar claro que Estados Unidos tiene “serias dudas” sobre los beneficios que conlleva un diálogo de este tipo con un régimen “antidemocrático”, que intenta perpetuarse en el poder por la vía dinástica pasando la vara de mando de un Castro (Fidel) a otro (su hermano pequeño, Raúl). Insistió en que la isla necesita un “cambio estructural” que barra las actuales instituciones castristas y dé paso a un gobierno democrático y en libertad, el único escenario que “merece” el pueblo cubano.

Asimismo, volvió a defender a los disidentes cubanos a los que Moratinos declinó ver en su reciente visita a La Habana. Si bien admitió que España “reconoce” la importancia de este colectivo en el futuro de la isla, Rice subrayó, en una velada crítica a su anfitrión, que los opositores deben saber que les apoyan aquellos, como españoles y estadounidenses, que tienen “la suerte de vivir en libertad”.

Ante la contundencia de las palabras de Rice, Moratinos intentó hacer ver que las tácticas y estrategias de Madrid y Washington hacia la isla caribeña son “complementarias y no contradictorias”. Y tras constatar que su invitada tenía sus “reservas” sobre el camino emprendido por él con su viaje a Cuba, expresó su deseo de que, en un cierto tiempo, su homóloga estadounidense se convenza de que la táctica española da sus frutos. Lo malo es que la respuesta fue rápida. En cuanto escuchó la traducción del español al inglés, Rice negó tajantemente tal posibilidad con la cabeza y de forma ostensible.

Además, el ministro se irritó cuando un periodista estadounidense le preguntó cuándo se verá con los disidentes cubanos. “Nos preocupamos de los disidentes, liberamos a los disidentes, estamos preocupados por la mejora de los derechos humanos en Cuba”, dijo un Moratinos a la defensiva, sin dejar pasar la ocasión para devolver parte de los agravios a su invitada. Así, recomendó que no se hable de “percepciones” y sí de hechos concretos. “¿Quién habla más con los disidentes?”, remachó el ministro en una incómoda comparativa sobre el papel de España y Estados Unidos en la isla. Al final, sólo coincidieron en que hay que trasladar a La Habana la exigencia de una transición democrática.

Al margen de la cuestión cubana, el jefe de la diplomacia española subrayó que con esta visita de Rice, la primera oficial de este nivel en los tres años de Gobierno socialista, las relaciones hispano-estadounidenses quedan “plenamente normalizadas”, después de los “altibajos” que hubo tras la retirada unilateral española de Irak.

Incluso se deshizo en elogios ante la “labor histórica” que Condolezza Rice está desempeñando en Oriente Próximo para alcanzar un acuerdo definitivo de paz en la zona. Y, en un claro guiño hacia la Administración de Washington, Moratinos dijo que España, al igual que la primera potencia mundial, está preocupada por el cierre de la emisora Radio Caracas Televisión que ha decretado el Ejecutivo venezolano de Hugo Chávez.

Libertad de expresión
Dijo que es un claro ejemplo de límite al ejercicio de la libertad de expresión, lo que le vino en bandeja a Rice para exigir a Caracas que cese en sus ataques a los medios opositores. Pero no se quedó ahí. La secretaria de Estado norteamericana censuró las “interferencias” que lleva a cabo el presidente venezolano en otros países de la región —caso de Bolivia, Nicaragua o Ecuador, por ejemplo—, a los que recordó que su país tiene excelentes relaciones con los gobiernos de izquierdas en Brasil, Uruguay y Chile. “No es Estados Unidos el que tiene que elegir quiénes son los líderes” en estos países, confesó Rice. Si Salvador Allende levantara cabeza...

Vuelos de la CIA
Coincidiendo con la estancia de Rice en Madrid, el juez de la Audiencia Nacional Ismael Moreno rechazó la petición de las acusaciones populares de citar como testigo a la jefa de la diplomacia estadounidense, en la causa que se investiga en España por el presunto traslado irregular de presos en vuelos de la CIA que hicieron escala en territorio español. El magistrado hizo suyos los argumentos de la fiscalía ya que una citación no sería “ni procedente ni útil" cuando, además, no existe "razón de urgencia" para practicar esa prueba. El escándalo diplomático hubiera sido mayúsculo de haber cursado la citación.