Chile y la Clase Media
ESTUDIO.
El estrato alto cree ser más pobre de lo que es en la práctica: Vivir en una burbuja
Por el nivel de ingresos que le asignan a la clase media, algunos chilenos creen vivir en España o Portugal.
El 60% del grupo más rico de Chile se considera de clase media. Y estima que el sueldo de este último grupo es superior al millón de pesos mensuales, casi 3 veces más que la realidad.
ALEJANDRO SÁEZ ROJAS El Mercurio, 2 de octubre de 2005
Por el nivel de ingresos que le asignan a la clase media, algunos chilenos creen vivir en España o Portugal.
El 60% del grupo más rico de Chile se considera de clase media. Y estima que el sueldo de este último grupo es superior al millón de pesos mensuales, casi 3 veces más que la realidad.
ALEJANDRO SÁEZ ROJAS El Mercurio, 2 de octubre de 2005
Desubicados. Así se puede considerar a un porcentaje importante de los chilenos cuando se les pide situarse en la escala de ingresos del país. El Presidente Patricio Aylwin, recordó el director social del Hogar de Cristo, Benito Baranda, se consideró a sí mismo de clase media: "cuando por ingresos y estudios pertenecía a la clase alta. Aunque su visión es la que comparten muchos otros chilenos", dice Baranda. Más ubicado ha sido el Presidente Lagos, quien estimó que él y sus ministros son parte de la minoría que explica las diferencias sociales existentes en Chile. El Primer Mandatario gana $5.400.000 brutos al mes.Al economista de la Universidad de Chile Javier Núñez le llamó la atención que muchos de sus conocidos se consideraran de clase media, aunque en la práctica por su salario se situaban en el 10% más rico de la población e incluso en el 5% o más.Animado por la idea de que la gente estaba perdida respecto de cuál era su posición relativa en la escala de ingresos, decidió consultar lo mismo a un grupo más amplio de gente. En realidad, agregó tres preguntas a la encuesta de empleo que confecciona el Departamento de Economía de la U, interrogantes que se formularon a 3.000 individuos.Y lo que era una percepción entre su grupo cercano se transformó en una conclusión sólida: el 62,4% de aquellos que pertenecían -según la encuesta Casen- al 5% más rico de la población se autoclasificó como parte del estrato de ingresos medios. El 30,4% de ese mismo grupo estimó que era de ingresos "medio-altos" y hubo hasta un perdido 5,4% que consideró que sus rentas lo ubicaban en el segmento "medio-bajo". Y estos resultados se repitieron entre el 1% más rico de la población encuestada: el 30,8% dijo que pertenecía al ingreso "medio-alto" y el 46,2% dijo estar en un nivel de ingresos medios. Sólo el 23% de este grupo se clasificó como de ingresos altos.Para el experto, la evidencia muestra que hay un grupo importante de chilenos que está "anclado" a su realidad más inmediata. Que a partir de lo que ven todos los días, se imaginan cuál es su posición de ingresos relativos y que en la práctica consideran que hay mucha más gente rica sobre ellos de lo que en verdad arrojan las cifras."Inflación" de sueldosNúñez buscó confirmar los resultados tratando de limpiar del fenómeno el pudor. Esto es que, por vergüenza, un porcentaje de los encuestados se diga más pobre de lo que en verdad es. Por eso, también les preguntó ¿cuánto cree que son los ingresos mensuales en Chile del grupo bajo, del medio y del alto? En definitiva, cuánto creen que ganan los otros. El porcentaje de la población que está entre el 10 y el 5% más rico dijo, en promedio, que el ingreso mensual del estrato medio se situaba en 1.100.000; es decir, casi 3 veces más que el ingreso promedio efectivo que existe en Chile y que bordea los $400.000 mensuales. Incluso, el 1% más rico del país estima en promedio que el ingreso de un hogar de clase media bordea el 1.700.000."Si se toman estos resultados, hay un grupo de la población chilena que cree estar viviendo en un país como España o Portugal y no en Chile", acota Núñez. Para el experto, esta sobreestimación de lo que ganan los otros es un argumento adicional para considerar que se vive en una fantasía, en un verdadero mundo de Bilz y Pap.El académico quiso ir más allá. Trató de analizar cómo se autoclasifican grupos pertenecientes a "élites" que participen en la toma de decisiones en el sector público o que ostenten puestos relevantes en el sector privado, como por ejemplo profesionales: el 10% de las personas de ingresos más altos, todos los graduados universitarios, e incluso gente que trabaja en el sector público perteneciente al 10% de mayores ingresos se perciben a sí mismos como del "grupo medio" de ingresos. En una escala de uno a cinco, se catalogaron todos con valores cercanos al 3 (ver infografía). Y todos estos miembros de la élite sobrestimaron cuánto es lo que gana una familia de ingresos en Chile. Los más ubicados fueron, por suerte dice Núñez, quienes trabajan en el sector público. Estos últimos creen que el ingreso de una familia media en Chile es de 945.000, más del doble de lo que es en la realidad.A Benito Baranda, del Hogar de Cristo, las conclusiones del estudio de Núñez no lo sorprenden: "Revelan la poca conciencia que tenemos las personas de clase alta de que somos parte del 10% más rico de la población", advierte.Rodrigo Castro, investigador del Instituto Libertad y Desarrollo, explica que no existe una definición precisa de lo que es la clase media y "en general la mayor parte de la población de Chile se tiende a autopercibir como de clase media, incluso profesionales que pertenecen al 20% más rico de la población".Adimark ha estimado que este estrato podría alcanzar al 73% de la población nacional, con ingresos que van desde los $250.000 a $1.200.000 mensuales.Para el cientista político Patricio Navia, el que la mayor parte de la población se considere de clase media tiene elementos positivos. "En la medida en que seamos un país que valore y respete a ese grupo, tendremos más opciones para promover la igualdad de oportunidades".Pero para Navia hay otros aspectos que son "tremendamente" negativos: "Cuando la gente de más altos ingresos cree que ellos son del estrato medio, entonces sienten que el Estado debería ayudarlos a ellos también, en circunstancias de que ellos están entre los grupos de más altos ingresos, los que constituyen la base impositiva de un sistema que promueva la redistribución"."Es difícil hablar de redistribución de verdad, con mejoras en la calidad de educación y el acceso de los más pobres si los sectores acomodados tienen expectativas de que el Gobierno los tiene que ayudar a ellos, porque son, a su propio modo de ver, clase media", dice Navia."En múltiples ocasiones tenemos gente que dice que ellos son de clase media, pero siempre fueron a colegios privados o sus papás eran embajadores", alega Navia: "Pienso en Sebastián Piñera o en el Senador José Antonio Viera-Gallo, que hace poco los escuché decir que eran de clase media, ¡pero sus papás fueron embajadores! Los embajadores no son de clase media, esos sueldos no son de clase media", remarca Navia.El sociólogo Cristóbal Marín, de la Universidad Diego Portales, cree que en general los grupos altos y medios altos tienen una percepción distorsionada y muy poca información respecto de los ingresos reales del resto de la población. Esto podría incidir en una menor sensibilidad y disposición hacia políticas redistributivas."Las evidencias muestran que hay una percepción de bienestar general muy alta entre esos grupos, especialmente de expectativas futuras y en relación con el pasado de sus padres. Estos grupos además son testigos de un consumo y acceso a educación superior nuevo por parte de los grupos de menores ingresos. Todo ello contribuye a una cierta sobrestimación del poder adquisitivo y bienestar de los grupos de menores ingresos", dice Marín, y que es precisamente lo que muestra el estudio de Núñez.El investigador del instituto Libertad y Desarrollo Rodrigo Castro cree que todos los estratos sociales han cambiado la visión que tienen de ellos mismos. En parte, por el enorme acceso a bienes que han tenido todos los grupos. Eso habla de que el bienestar de la población, en general, ha mejorado y eso tiende a incidir en las percepciones de las demás personas.Ese mayor bienestar tal vez alimente la burbuja en la que viven algunas personas.
0 Comments:
Publicar un comentario
<< Home